Descripción del proyecto

Conejo al Romero y Vino Blanco Fácil y Rápido
El conejo al romero con vino blanco se considera un plato gourmet y de alta cocina. Pues es un tipo de carne con el que se pueden elaborar recetas exquisitas. Aquí queremos enseñarte a cómo preparar conejo con adobo de romero y vino blanco.
La carne de conejo se caracteriza por ser blanca y con poca grasa. Es un ingrediente que se incluye en recetas fáciles mediterráneas, y por supuesto en la comida casera. El conejo al romero con vino blanco es una comida que debes probar.
Cuando buscamos un adobo para carnes, no hay un regla general en donde se aplica un proceso único para un aderezo espectacular, se pueden usar hierbas aromáticas para concentrar el sabor y los aromas de la receta. Esta vez haremos el conejo con romero y vino blanco.
Cómo hacer conejo al romero con vino blanco es más fácil y rápido de lo que crees. Si quieres ver otras recetas con carnes y adobos, puedes entrar y explorar las que más te gusten.
INFORMACIÓN NUTRICIONAL
- Cocina: Española
Comensales: 4
- Dificultad: Fácil
Tiempo total: 45 mins
- Calorías: 230
- Grasas: 9g
- Carbs: 150g
- Proteínas: 32g
Ingredientes para hacer el conejo al romero y vino blanco
1 Pieza de Conejo
4 Rebanadas de Pan frito
1 Vaso de Vino blanco
3 Dientes de Ajo
1 Cucharadita de Romero en polvo
2 Ramas de Perejil
1 Pizca de Pimienta negra molida
1 Vaso pequeño de Aceite de oliva
1⁄2 Cucharadita de Sal
Cómo hacer conejo con adobo de romero y vino blanco
Sigue la receta paso a paso para obtener una preparación con aroma y sabor espectacular. Disfruta de este guiso de conejo fácil y rápido:
Corta el conejo en 8 piezas de tamaño similar. Luego pelamos y cortamos los ajos y el perejil.
Freímos el pan en una sartén con aceite. En un mortero grande añadimos el ajo, perejil, pan frito y añadimos vino blanco. Colocamos el conejo en un bol grande y agregamos el romero mezclando todo para concentrar los sabores.
En el mismo bol del conejo, añadiremos un buen chorro de aceite, salpimentamos y añadimos el ajo, vino, pan y perejil. Lo siguiente será dejar el conejo macerar con todo durante unas 2 horas para que absorba bien todos los sabores.
Al pasar ese tiempo colocamos una cazuela con aceite y freímos los trozos de conejo. Cuando consigamos que el conejo esté dorado, añadiremos a la cazuela el líquido sobrante del macerado.
Añadimos agua hasta que el conejo quede bien cubierto y lo dejamos cocer a fuego lento hasta que la carne de conejo esté tierna y la salsita espesa. Y listo para servir y disfrutar de este plato. ¡Buen Provecho!